Picotazos dulces de sangre al amanecer en violentos lechos, O la poesía y Allen Ginsberg
En este poema ( de los tres mejores del siglo XX en mi obsesiva conciencia) se encienden y apagan más intensas vidas que las que deambulan ante nuestros ojos en veinte años.
Una expresión tan sublime que supera el entendimiento y puede ser incluso detestable de leer, por toda la miserable y a la vez maravillosa belleza que encierra una mente que roza la perversión adentrándonse en el genio, la locura, la depresión, el ansia de vivir y el ritmo frenético de una chispa que conoce el final amargo de la ceniza.
la vida se precipita en fondo y forma en las líneas de este enfermo entrañable emblema de la Six Galery. Se puede intuir la alucinación de la ciudad, las calles, la noche y todo rodeado por una intensa cinética que hace que todos sus elementos se muevan dentro de su marco adecuado. La coherencia de un picotazo nocturno en un cuadro expresionista narrado y descrito en un lienzo tan atractivo como los accidentes de coches de Cronenberg.
Si hubiese vivido en las calles de Ginsberg no se si mi absurda mente hubiese superado la prueba del día a día con tanta dignidad como para despertar desayunando una cerveza en calzoncillos arrancando un pitillo de la noche y fumando mientras sonrío al ver el boquete que en mis calzoncillos me mira susurrandome lo perdedor y amargamente feliz que soy por arder sin ver la ceniza de los camiones de la basura alineados con el enorme sol naranja que asoma en la carretera al amanecer.
" He visto las mejores mentes de mi generación destruidas por la locura, histéricos famélicos muertos de hambre arrastrándose por las calles, negros al amanecer buscando una dosis furiosa, cabezas de ángel abrasadas por la antigua conexión celestial al dínamo estrellado de la maquinaria de la noche, quienes pobres y andrajosos y con ojos cavernosos y altos se levantaron fumando en la oscuridad sobrenatural de los departamentos con agua fría flotando a través de las alturas de las ciudades contemplando el jazz. Quienes expusieron sus cerebros al Cielo, bajo El y vieron ángeles Mahometanos tambaleándose en los techos de apartamentos iluminados. Quienes pasaron por las universidades con ojos radiantes y frescos alucinando con Arkansas y la tragedia luminosa de Blake entre los estudiantes de la guerra. Quienes fueron expulsados de las academias por locos por publicar odas obscenas en las ventanas del cráneo. Quienes se encogieron sin afeitar y en ropa interior, quemando su dinero en papeleras y escuchando el Terror a través de las paredes. Quienes se jodieron sus pelos púbicos al volver de Laredo con un cinturón de marihuana para New York. Quienes comieron fuego en hoteles coloreados o bebieron trementina en Paradise Alley, muerte, o purgaron sus torsos noche tras noche con sueños, con drogas, con pesadillas despiertas, alcohol y verga y bolas infinitas, ceguera incomparable; calles de nubes vibrantes y relámpagos en la mente saltando hacia los polos de Canadá y Paterson, iluminando todas las palabras inmóviles del Tiempo, sólidos peyotes de los vestíbulos, amaneceres en el cementerio del árbol verde, ebriedad del vino en los tejados, puestos municipales el neón estridente luces del tráfico parpadeantes, vibraciones del sol, la luna y los árboles en los bulliciosos crepúsculos de invierno de Brooklyn, estrepitosos tarros de basura y una regia clase de iluminación de la mente"
Allen Ginsberg AULLIDO
1 Comments:
¿ESE NO ES EL LOKO DE LAS COLES DE LA HORA CHANANTE?
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